Lun, 27 de Septiembre 2010, 19:47:23 -- Actualizado: Sab, 25 de Septiembre 2010, 08:17:18
Julián Márquez revela secretos de su nueva novela "La rotación del Zodíaco"
'El proceso de gestación de esta novela, La rotación del Zodíaco, podría dividirse en dos etapas. Una que puede definirse como de ilusión, situada a mediado de la década del ochenta del siglo pasado... Luego vino un segundo período de precisión de la escritura, hacia finales de los años noventa', explica el escritor Julián Márquez.


 
Leer Texto
 
Ver Fotos
 
 
Votar: 
  • Currently 0; ?>/ TOTALSTARS
  • 1
  • 2
  • 3
  • 4
  • 5
220 Lecturas  Enviar noticia a un amigo Imprimir noticia

Por Edgardo Agüero Sánchez

"Releyendo Rayuela, de Julio Cortazar; Tres tristes tigres, de Guillermo Cabrera Infante; y El palacio de las blanquísimas mofetas, de Reinaldo Arenas, descubrí algunos elementos análogos a los que me había  propuesto desarrollar en la novela. Se trataba en concreto de la inserción polifónica de varias voces narrativas para establecer un contrapunto coral en el desarrollo de la narración, como podrá constatar quien lea el libro".

Así describe parte de la búsqueda creativa el escrito venezolano Julián Márquez, quien ya retiró de la imprenta su nueva novela "La rotación del Zodíaco", que en octubre será presentada en Caracas y dristribuida nacional e internacionalmente.

Lo consultamos sobre esos secretos que todo creador va revelando al calor de la fiesta que implica dar a luz un texto literario.

 

 

-¿Cuánto tiempo te llevó escribir esta novela, cómo fue su proceso creativo?

 

El proceso de gestación de esta novela, La rotación del Zodíaco, podría dividirse en dos etapas. Una que puede definirse como de ilusión, situada a  mediado de la década del ochenta del siglo pasado. Es un periodo con la idea de la novela titilando en la mente, en la búsqueda de su arquitectura en el pensamiento, sin llegar todavía a adquirir un corpus definitivo. Por entonces, casi de improviso, escribía los primeros apuntes, mientras escudriñaba en diversos libros de astrología. Por razones lógicas, no podía abordar una novela de esta índole sin realizar una minuciosa investigación astrológica. Luego vino un segundo período de precisión de la escritura, hacia finales de los años noventa. En esa etapa encontré algunos escollos en la estructura a formar, que fueron resueltos con algunas lecturas. Encontré la solución releyendo Rayuela de Julio Cortazar, Tres tristes tigres de Guillermo Cabrera Infante y El palacio de las blanquísimas mofetas de Reinaldo Arenas. En estas obras descubrí algunos elementos análogos a los que me había  propuesto desarrollar en la novela. Se trataba en concreto de la inserción polifónica de varias voces narrativas para establecer un contrapunto coral en el desarrollo de la narración, como podrá constatar quien lea el libro.

 

 

-Percibo un elemento lúdico en ella. ¿Asumes la literatura como un juego?

 

     Toda escritura consiste en armar palabras, ya de por sí eso encierra un elemento lúdico. Se juega con los fonemas para transformarlos           

en  morfemas, hasta llevarlos a alcanzar el orden sintagmático de las oraciones. Este encadenamiento lingüístico conforma toda una estructura expresiva donde está presente de manera dialéctica una forma específica del juego. El lenguajes escrito se manifiesta igual que un ensartamiento de cuentas, que a simple vista conforma una representación lúdica  donde interviene la mano necesaria para la escritura, como en el juego de mano, juego de villano; pues con villanos también ha progresado la escritura con sus juegos de palabras en ese nunca acabar de la literaturidad. Cuando los escritores (no todos, por cierto)  se despojan del corselete y se suelten a escribir con la libertad que exige la palabra, se practica la literatura como un juego esplendoroso, con toda la responsabilidad que dicho juego implica. La idea del arte como juego viene de lejos, fue tomado muy en serio por pensadores tan singulares como Platón o Kant. Para  Johan Huizinga, la literatura es en sí misma un juego constante con la palabra.

 

 

-Me consta que la novela ha recibido muy buenos comentarios. ¿Cómo consigues mantener a raya a la vanidad?

 

1)   Con aguda lucidez Montaigne renegaba de la vanidad, ponderando la humildad. Por mi parte, parafraseando al inmortal Jorge Luís Borges, expreso: que otros se vanaglorien de su exhibida vanidad que yo haré alarde de mi honesta humildad. Por lo menos me ha deparado algunos buenos amigos. En el plano de la modestia me encuentro muy bien, por ahí me muevo como pez en el agua. Nunca absorberé los vapores delicuescentes de la vanidad. Esa actitud dista mucho de mi temperamento natural, aunque algunos piensen lo contrario.

 

-¿Cuánto de autobiográfico hay en la novela?

 

Por la reiteración de esta pregunta, sospecho que se intenta descubrir aspectos secretos de mi vida. No niego que hayan ciertos elementos autobiográficos en La rotación del Zodíaco, pero la proporción es mínima. No es una materia determinante en la novela. Lo mismo ha sucedido con algún cuento mío, en que la referencia autobiográfica es apenas tangencial. Por lo demás, no creo que exista un solo escritor en cuya obra se omita cualquier referencia a lo suyo vivencial. Una vida no se sucede por si sola, sin dejar huella en la escritura, algo de eso debe reflejarse en la obra que se escribe, consciente o inconscientemente. Quienes me conocer saben lo distanciado que estoy de cualquiera de los actantes de la novela, incluyendo al Venerable Tolomeo, el personaje principal.

 

-Es evidente el uso que haces del las frases hechas y los coloquialismos con una marcada intención. ¿No le temes a los lugares comunes?

 

2)   Parte del lenguaje de esta novela entraña un sentido paródico, con más sarcasmo debajo de la superficie del percibido mediante una somera lectura. Por lo tanto no puede prescindirse del uso de lo que solemos llamar “lugares comunes” o “frases hechas”. Estas construcciones verbales están allí con la intención deliberada de proyectar el habla de ciertos grupos sociales con un peso específico en nuestra realidad cotidiana, presentados en un modo caricaturesco, con el propósito de reflejar cómo somos a través de nuestras expresiones coloquiales al uso. Muchas grandes obras de la literatura universal sobreviven gallardamente a pesar de sus lugares comunes, para muestra es suficiente leer el imperecedero Don Quijote de la Mancha de Miguel de Cervantes. Asimismo, Flaubert suministró con maestría una porción de lugares comunes a la vida de su estupenda Madame Bovary. Y más cercana en el tiempo, aunque próximo a cumplir su primer centenario, se encuentra la afamada Ulises de James Joyce. Los lugares comunes no invalidan una obra literaria si estos responden a las exigencias del lenguaje de la obra.

 

-¿Acaso, cómo El Venerable (protagonista de la novela) absorto en las vibraciones sonoras de las esferas, buscas las señales del fin?

 

En realidad, la astrología no me atrae como un creyente apasionado de la influencia de los astros sobre la existencia humana. En todo caso, seduce mi imaginación por la influencia generalizada que ejerce sobre un vasto aglutinamiento de personas. En todos los continentes viven hombres y mujeres de diversas condición social que religiosamente consultan cartas astrales y leen los horóscopos de revistas y periódicos donde estos son publicados. Es un fenómeno social curioso, con ciertas particularidades de carácter psicológico. Hasta quienes niegan la influencia de los astros, cuando encuentran un horóscopo no dejan de leerlo para conocer si están bien o mal aspectados por las emanaciones astrológicas. Su existencia abarca largos milenios, desde la civilización sumeria hasta estos días de la post-modernidad. Aunque en el camino perdió su antiguo contenido científico, todavía continúa teniendo vigencia, quizá como un rito de nuestros recónditos sentimientos míticos.

 

-¿En qué o en quién piensas cuando escribes. A quién va dirigida tu literatura?

 

La literatura ha consumido buena parte de mi vida, de modo que cuando escribo solo pienso en la literatura. Claro que ésta no vive por si sola, su existencia depende, en cierto modo, del lector, que no es un accidente en la vida de un libro. Pero no es necesario en el momento de la escritura, su contacto con el escritor se produce más tarde, a través de un proceso que atañe a la aparición pública del libro. Escritores del talante de Stendhal, Melville, Kafka y Joseph Roth, por ejemplo, tuvieron pocos lectores en su tiempo. Es posible que mientras escribían no pensaran en un lector específico. Ahora sus obras se venden en paralelo con los autores del boom de la literatura light, textos de autoayuda y los libros de los enfants terribles de McOndo y Nocilla, confundidos con los best seller de moda. Por lo visto, la presencia del lector también puede ser una intervención temporal. Lo importante no es a quien está dirigido un libro, sino que el libro se escriba.

 

-Norman Mailer quería escribir la gran novela estadounidense. ¿Te has planteado tú hacer lo mismo en Venezuela?

 

Con el desapego a la vanidad me protejo de tamaño despropósito. En ningún momento he pensado escudarme detrás de la palabra para conquistar heroísmos literarios. Con poseer el lenguaje expresado en los libros que hasta ahora he tenido en suerte publicar es suficiente. Las pretensiones del escritor norteamericano que las asuman otros aquí en Venezuela, yo me conformo con seguir construyendo modestas historias narrativas, reñidas con los apuros por alcanzar el panteón glorioso de la literatura nacional. Los aspirantes al pedestal de las letras son cada vez más cuestionados, sin darle importancia a la calidad de sus obras, sobre todo ahora cuando los avatares políticos han ubicado a los escritores venezolanos en bandos, al parecer, irreconciliables. Mientras tanto, continuaré escribiendo al margen de esas rencillas.

 

-Borges dice que la literatura es una forma de la felicidad, por otra parte, muchos escritores se quejan del sacrifico que deben hacer. En tu caso, ¿sufres o gozas la escritura?

 

Considero la felicidad como algo abstracto, muy efímero, una de las tantas convenciones inventadas por el hombre para auto engañarse. Sin embargo, escribir un libro implica un placer ambiguo, pero placer al fin. Un poco en la línea Jorge Luís Borges, prefiero referirme al gozo que se experimenta al escribir algo que a uno lo satisfaga. En ese caso, quizá estallé una fiesta del espíritu, pero como en ciertas fiestas es posible que surjan momentos de sufrimientos antes o después del disfrute. Una obra publicada se sitúa en la balanza del rechazo y la aceptación. La felicidad y el sufrimiento dependen del lado en que se incline esa balanza. Muchos libros bien escritos han ido a parar al fondo de helados ríos, marcados por la decepción. La literatura encierra riesgos, con resultados no siempre felices.

 

-El maestro argentino afirmaba que la literatura no es más que un sueño dirigido. ¿Estás de acuerdo con esta afirmación?

 

Los sueños están integrados indisolublemente a nuestra realidad, es imposible concebir la vida sin ellos. Siguiendo a Calderón de la Barca podemos sostener que la vida es sueño. Estos están presente en innumerables textos de la literatura fantástica y en muchas escenas de la realista también. Las pesadillas son sueños terribles, producidos dentro de un mundo atroz que bien podríamos interpretar como un mal sueño literario, acaso suministrado por el largo sueño de Brahma, donde lo maravilloso sería despertar en el fondo de una botella de vino o de cocuy, el espacio ideal para el eterno sueño de la muerte.

 

-¿Qué diagnóstico a vuelo rasante harías de la novelística venezolana actual?

 

Nadie bien informado acerca de nuestra narrativa actual puede negar que en los últimos años la novelística venezolana muestra síntomas de buena salud. Sin ambages, mi diagnóstico es positivo. En los anaqueles de las librerías capitalinas y en las del interior del país, se encuentran varias novelas nacionales que no desmeritan antes las importadas. No quiero referirme en especial a ninguna de las novelas publicadas recientemente por algunos de nuestros narradores, pero la oferta del mercado librero local muestra los aciertos de un grupo de meritorias novelas nacionales prestas a satisfacer la curiosidad y la necesidad de lectura de cualquier lector exigente, dentro y fuera de Venezuela.

 

-Flaubert pensó que cada cosa sólo puede ser dicha de un modo, y que es obligación del escritor dar con ese modo. ¿Compartes esa preocupación?

 

No sólo Flaubert, ha expresado ese aserto, otros autores, también de acreditada fama, han dicho lo mismo. Por lo general, los temas literarios siempre son los mismos. El modo es una variación de las circunstancias, que pueden ser mínimas, trazadas por endebles fronteras existenciales. El modo hace variable la cosa, le confiere una forma particular que, como dice Roland Barthes, es la marca individual del autor sobre su obra. En los talleres de creación literaria, especialmente en los de narrativa, que imparto desde hace tiempo, siempre le manifiesto a mis alumnos que los temas son universales, en esencia repiten las mismas cosas, sólo las cambia el modo de narrarlas, el trastrocamiento impuesto por la forma que viene a ser, realmente, el sello intelectual de quien escribe.

 

-Conrad afirmó: “Escribo, es cierto, pero es como sumar un crimen a otro crimen, cada línea es tan odiosa como una mala acción. Soy como un hombre que ha perdido a sus dioses”. ¿Has perdido tus dioses?

 

-En cada libro que se escribe se produce, inevitablemente, entre lo sublime y lo abominable, un despojamiento espectral; en esa desarticulación fantasmática, el escritor queda en la intemperie, se deshace de sus harapos más íntimos. Mediante ese desalojo, en su espíritu se manifiesta un vacío agónico, una especie de náusea sartreana, algo viscoso que luego vuelve a recobrarse con las pequeñas y las grandes miserias y dichas que conforman la magra existencia del Hombre. Una vez más el desamparo invade el cuerpo y la consciencia para manifestarse nuevamente en la escritura. Es una especie de noria trágica, una angustia de la finitud corriente del vivir, animada por las vanidades y las desgracias con que Dios y los dioses, vanas ilusiones, podrían expresar el sentido absurdo y criminal de la vida, revelados en las narraciones más tenebrosas como sucede con el escabroso tema de el corazón de las tinieblas del mismo Joseph Conrad. 

 

-Una sentencia de Eduardo Casanova condena la crítica literaria en Venezuela, según sostiene, ésta “murió hace tiempo”, dice que “en 1930, ya estaba enterrada bajo una enorme lápida de petróleo y concreto armado”. ¿Estás de acuerdo?

 

-Me parece una opinión un poco exagerada. Según ese criterio en Venezuela no ha existido más crítico que Jesús Semprum. El hecho de que la crítica no valore la obra narrativa de un escritor cómo este considere que se lo merece, no significa que aquí no se esté realizando una labor critica. El escritor siempre necesita del crítico, es una relación necesaria, porque permite, en cierta forma, una reconstrucción de la obra. Es cierto que hemos tenidos críticos despreciativos con la literatura escrita entre nosotros, pero el panorama tiende a cambiar. En este momento existe un conjunto de ensayistas dedicados a estudiar la literatura venezolana con un alto sentido analítico, con más entusiasmo que en el pasado. No se trata ya de la simple reseña de periódico ni de revista, se trata de un trabajo más enjundioso, más sistemático, que contribuye a iluminar las sombras que todavía penden sobre buena parte de nuestra literatura. Incluso, esa labor también ha repercutido más allá de la geografía nacional, y esto ha sido favorecido por algunos jóvenes que han salido al exterior a realizar estudios de postgrado en literatura. Muchos de estos estudiantes trabajan con literatura venezolana y han logrado que estudiosos de fuera también se contagien y comiencen a interesarse por la literatura que se escribe en nuestro país. 

 

-Sartre comparó a la crítica con una apuesta. Cuando un libro aparece los críticos apuestan a que es bueno o a que es malo o a que es regular. ¿Cuál es tu opinión?

 

-En buena medida la suerte de un libro depende de que se le tome en cuenta. Aunque parezca contradictorio, porque siempre se aspira a lo favorable, no concierne bajo cuál criterio y circunstancia se produzca el interés sobre él. Tomando una frase prestada, puedo decir, no importa que se hable mal de un libro, pero que se hable. En esa condición, al menos el trabajo del escritor no pasa inadvertido.

.

Enfoques365.net

SU MEJOR ALIADO INFORMATIVO INDEPENDIENTE

 

Suscríbase a www.enfoques365.net y reciba gratis
nuestro resumen diario de noticias a las 6 am y 6 pm

 

Twitter: @enfoques365

 Facebook: enfoques comunicaciones

 

Envíe sus informaciones y opiniones a

enfoques365.[email protected]

 
Últimas Noticias
Hora Noticia
15:12 Persecución política contra Piedad Córdoba denuncia diputado colombiano
14:54 Destituida e inhabilitada por 18 años la senadora Piedad Córdoba por supuestos nexos con las FARC
13:09 Gobierno garantiza abastecimiento de alimentos y artículos decembrinos
12:35 Chávez le dice a la Kirchner que ganó con 98 diputados
12:29 Google está de cumpleaños
12:13 Venezuela sigue imbatible en el primer lugar en inflación
11:11 TAL CUAL / La gran derrota
10:42 ANÁLISIS / El gobierno ganó perdiendo, aunque los resultados se parecen a los de 1998 y 2000

  1. 18 detenidos por la fiesta rave en Higuerote, entre ellos 5 funcionarios judiciales y uno de la Alcaldía de Caracas
  2. CGR / Declaración Jurada de Patrimonio tiene formato electrónico
  3. Inscripción de bachilleres en el RUSNIES será hasta el 7 de mayo
  4. Nuevo ferry operará ruta La Guaira-Margarita en 5 horas
  5. Asesinatos policiales tienen en jaque a "El Gato" Briceño en Monagas
  6. ¡EXCLUSIVO! Prensa de Monagas se autocensura y niega derecho a la información
  7. Todos los bachilleres deben registrarse en el RUSNIES para ingresar a la educación superior
  8. Blog www.chavez.org.ve abre hoy a las 8 de la mañana
  9. Leones del Caracas presentó su equipo 2009-2010
  10. Resultados de la prueba vocacional universitaria estarán en la web el martes 23
  1. Obama no intervendrá en crisis de Gaza antes de asumir la presidencia
  2. Gobierno boliviano continuará nacionalización de recursos y empresas
  3. El IVIC en la mira de los fascistas
  4. DOUGLAS BRAVO / El de Chávez es un régimen militarista y neoliberal
  5. Zapatistas llaman a globalizar la lucha, a 15 años de su insurgencia
  6. Daños materiales menores produjo el sismo en Morón, estado Carabobo
  7. Nuevo ferry operará ruta La Guaira-Margarita en 5 horas
  8. Gobierno debe iniciar plan de seguridad ciudadana, dice dirigente copeyano
  9. Nuevos altos oficiales juraron por "la construcción del socialismo... y la independencia nacional"
  10. GRAN CARACAS / Tapiadas 7 personas por derrumbe en carretera vieja de La Guaira
 
 
¿Cómo interpreta usted, los resultados del 26-S?
El gobierno fue derrotado por los malos candidatos del PSUV
La Mesa de la Unidad ganó por el voto castigo contra el gobierno
El Parlamento volvió a su relación tradicional Gobierno-Oposición
La Mesa de la Unidad salió mejor de lo previsto
La nueva Asamblea Nacional será igual que los parlamentos de 1998 y 2000
 
 
¡Sus noticias en su Email!

Suscríbase y reciba diariamente en su correo electrónico los títulares de enfoques365.net

EMAIL  

 
 
 

Lo más visto Enviados