Caracas, 04 Mar. ABN.- Primero Lakeland y ayer fue Kissimme la localidad que tuvo que experimentar un poco de la fiebre de Clásico Mundial de Béisbol que la selección de Venezuela ha llevado a los entrenamientos primaverales.
Luego de dos días de ver como cientos de fanáticos se volcaban a esperar que los jugadores criollos salieran del clubhouse de visitantes en la casa de los Tigres de Detroit, la emoción se trasladó a la casa de los Astros de Houston para lo que fue el segundo encuentro de preparación del combinado nacional.
'Esto no es tan diferente a lo que vivimos la primera vez', dijo Miguel Cabrera, antesalista del equipo criollo. 'El apoyo de los fanáticos se ha hecho sentir desde el primer día y eso a nosotros nos hace sentir muy bien, porque vemos que tenemos al público de nuestra parte. Yo veo a todos esperanzados en que podemos hacer algo mejor a lo que hicimos la primera vez'.
Asimismo, Bob Abreu, otro de los puntales del equipo, señaló que la oportunidad de defender los colores del país es una oportunidad que no se presenta todos los días.
'Sinceramente es un orgullo poder estar haciendo esto. Los muchachos y yo queremos sacarnos la espinita de la primera vez y nos preparamos mejor. Pero el apoyo que hemos recibido de todos aquí es algo que nos hace querer ganar', dijo Abreu.
Félix Hernández, uno de los jugadores que recién se incorporó al equipo, luego de convertirse en padre por segunda vez en su vida, también destacó la química que existe dentro del equipo.
'Quería estar aquí la primera vez, pero por una u otra razón no lo pude hacer, pero esta vez no había nada que me detuviera y por eso trataré de dar lo mejor de mí para que Venezuela se lleve el trofeo de campeón', dijo el valenciano.
'Apenas llegué sentí ese ambiente de camaradería entre los muchachos, incluso conmigo que estoy recién llegado. Estoy físicamente listo para poder ayudar al equipo y no pienso si lanzaré el primer juego o el segundo o si seré relevista. Yo únicamente lo que quiero es lanzar por mi país', aseguró el serpentinero.
Orber Moreno y Félix Hernández ya están a bordo.
Los dos últimos jugadores que faltaban para completar la nómina de 28 peloteros del equipo de Venezuela ya están uniformados.
El martes ambos se reportaron en horas de la tarde noche al cuartel general del equipo en Orlando y ya se colocaron por primera vez la casaca del equipo Nacional para entrenar con el equipo.
'Félix estuvo excelente', fueron las palabras con las que Roberto Espinoza describió la sesión de bullpen que tuvo el estelar abridor de los Marineros de Seattle, en la que realizó 45 envíos en los que mezcló rectas, curvas y cambios de velocidad.
'Este muchacho cuando esté a plenitud de condiciones van tener que fajarse para batearle', prosiguió Espinoza.
Con respecto a Orber Moreno, el derecho de los Leones del Caracas aún está terminándose de acondicionar físicamente antes de poder subir a la lomita en los próximos días. 'Esperemos que mañana pueda darnos un inning', dijo el técnico. |
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