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Caracas, abril 01.- Considera el gobernador Henrique Capriles Radonski, que “a Chávez se le puede derrotar en las elecciones presidenciales del 2012, sin embargo, el país hay que recorrerlo”.

-Cuando la gente me dice que debo lanzarme a la presidencia es porque estamos construyendo un Estado donde se trabaja para todos. Yo no entro en una casa y pregunto de qué partido son, afirma.

De acuerdo con las encuestas, Capriles es el político opositor que goza de mayor popularidad en Venezuela.

Asimismo, vale la pena recordar, que la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), celebrará primarias para elegir un candidato único que haga frente a Chávez en las presidenciales de 2012, cuando el jefe de Estado, que goza de un fuerte apoyo tras 12 años de gobierno, aspira a un tercer mandato.

-En la oposición hay conciencia de la necesidad de una unidad electoral. Pero no hay una oposición, sino varias: hay quienes creen que nada ha cambiado en Venezuela y quienes creemos que este país se transformó y hay que empujarlo hacia el futuro, acotó.

Por esta razón, comenta que “Venezuela necesita unirse para avanzar. La construcción de una nueva Venezuela pasa por incluir todas las visiones en un gobierno de unidad nacional".

Vivienda, educación, salud, empleo y lucha contra la inseguridad son los pilares de la gestión de Capriles, quien trabaja en una especie de frenesí los siete días de la semana.

-No estoy obsesionado con una posición de poder. Mi popularidad es más bien un compromiso. Estoy dispuesto a estar a la altura de la responsabilidad que me toque y estaré listo y preparado para asumirla, estima, misterioso sobre sus intenciones políticas, dijo.

Con una carrera fulgurante que le hizo ser presidente de la Cámara de Diputados, alcalde y ahora gobernador, Capriles asegura que el proyecto político para Venezuela debe ser una "democracia con un profundo contenido social".

-Chávez se comporta como el jefe de un partido no como un jefe de Estado. Pasó de un proyecto colectivo con mensaje social a un proyecto personalista, faraónico y mesiánico, advirtió.

Para concluir resaltó que, “Venezuela está en camino de abrir un nuevo ciclo. El próximo presidente debe ser un nuevo liderazgo y su primera tarea debe ser unir de nuevo a este país que Chávez ha dividido permanentemente".

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