Aunque el bilingüismo no previene este tipo de demencia senil, crea una reserva cognitiva que, al parecer, retarda sus síntomas, hallaron expertos del Instituto Rotman, del centro de investigaciones geriátricas Baycrest, de Toronto, Canadá.

A esta conclusión llegó el grupo de científicos que observaron que el lípido produjo la formación en el cerebro de depósitos de proteínas asociados a esta enfermedad. En el estudio publicado en Neurology, participó, entre otros, el doctor Kensuke Sasaki, de Kyushu University de Japón.

Se trata de un ensayo de implante cerebral que publica esta semana la revista especializada Journal of Neuruoengineering and Rehabilitation.

En esta enfermedad, el tejido cerebral degenera progresivamente, provocando pérdida de memoria y de capacidades mentales, sociales... y finalmente aislando al paciente del mundo que le rodea. Si bien no es parte del proceso de envejecimiento, el riesgo de desarrollar la enfermedad aumenta con la edad. Si el 5% de las personas de entre 65 y 74 años padecen Alzheimer, el porcentaje llega al 50% a partir de los 85 años.