Por Luis Manuel Escalante

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.Un traje de corderito,

 le han diseñado en La Habana;

 ha regresado mansito,

 ¡ya lo veremos mañana!

 

 

Tanto cerebro ha lavado

que por fin le ha tocado a él,

pues le han cambiado el papel

por el que siempre había actuado.

El modelo fracasado

que repetía cual lorito:

“no sirve”, dijo el perito,

y hay que empezarlo a cambiar;

mientras tanto debe usar:

un traje de corderito.

 

 

Esto implica no seguir

con el plan de expropiaciones,

y dar créditos blandones

al que quiere reinvertir.

Por supuesto, va a exigir

alguna acción soberana;

no estamos en carraplana

pero hay que tomar conciencia;

ropaje de conveniencia

le han diseñado en La Habana.

 

De fuente bien informada

ya supe que le han planteado:

que salga de todo aliado

de una radical parada.

Debe hallar a un camarada

que venga de un descansito,

que hable con Richi y Juancito

y no sufra de complejos;

de escuchar tantos consejos:

ha regresado mansito.

 

 

De madrugada volvió,

pese a estar convaleciente,

y ha sorprendido a su gente

que más flaco lo observó.

Ya las riendas retomó

de su ideología profana,

y como vio muy cercana

la conclusión de su lema:

hoy amor será su tema;

¡ya lo veremos mañana!.

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