Manuel Isidro Molina, director-editor de Enfoques365.net y columnista del semanario La Razón.

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Por Santiasgo Alcalá

El desgobierno gangsteril, del todavía más gangsteril, Hugo Chávez, agredió el jueves en la tarde a Manuel Isidro Molina. Una típica operación de sicariato ligth, porque no intentaron asesinarlo, sino advertirle, anunciarle, hacerle saber lo que le espera, de no deponer su labor profesional de recibir y difundir información de las corruptelas a la sombra del poder.

Molina no tuvo oportunidad de defenderse. Fue atacado a mansalva, de manera sorpresiva, vil, cobarde, por un matón que lo esperaba, agazapado, en el sitio menos transitado de la semiabandonada edificación que ocupa, parcialmente, el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería, SAIME, en la avenida Intercomunal de El Valle.

El atacante no intentó despojarlo de sus pertenencias. Se limitó a golpearlo por la frente con un casco de esos que utilizan los motorizados que pululan por la ciudad. Molina perdió el balance,  cayó al piso  y una vez allí, fue víctima de una andanada de puntapiés de su enconado atacante, que huyó al hacerse presente una persona que escucho las voces de auxilio del periodista quien ya se encontraba a punto de perder el conocimiento.    

Las corruptelas informadas por Molina

Manuel Isidro Molina ha sido un periodista a tiempo completo. Ex presidente del Colegio Nacional que agrupa a su gremio fue, también, presidente de la Comisión de Medios de la Cámara de Diputados del extinto Congreso de la República. Hoy, comparte jornada entre la columna “Pasando La Hoja” que publica cada domingo en “La Razón” y la dirección de “Enfoques365”, uno de los periódicos digitales más visitados por los internautas venezolanos.

¿Cuáles han sido las informaciones que desencadenaron la agresión?

Fruto del ejercicio de un periodismo investigativo, serio, documentado, imparcial, vehemente, muchas veces, en las últimas semanas, Molina, les ha informado a sus millares de lectores, las más variadas corruptelas de personeros que gravitan alrededor del desgobierno de Chávez. Se trata de negociados que han permitido transformar a sus perpetradores de pobres de solemnidad en propietarios de  colosales fortunas.

Dicho sea de paso, no es la primera vez que este comunicador social es blanco de amenazas. A mediados de agosto de 2010, fue víctima de un intento de linchamiento moral acompañado de las subsiguientes advertencias de proceso penal por hipotético vilipendio al presidente de la República. Todo por informar, con carácter de primicia, que el jefe de Estado tenía problemas de salud en sus fosas nasales.

¿Eran unos pólipos cancerosos que había que extirpar, o la afección en las mucosas era producto de cierto tipo de abusos por parte del paciente?

Al final, el tipo de padecimiento y sus posibles causas constituían lo de menos, porque lo demás, era y será siempre, el derecho que tenemos los venezolanos a estar informados.

Más recientemente, fruto del manejo esmerado de sus numerosas fuentes, Molina ha estado informando sobre la operación, ilegal, mafiosa, anticiudadana de varios bingos y casinos. Empresarios del envite y azar que cometen todo tipo de ilícitos, guapos y apoyaos, porque actúan con la ciencia y complacencia de altas esferas gubernamentales.

Igual ocurre con el clan familiar que hace y deshace en Seguros La Previsora y en la Superintendencia Valores. Un escándalo de nepotismo, prevaricación, adjudicaciones a dedo, venta de dictámenes, extorsiones a ex propietarios de casas de bolsa. Los límites de la desvergüenza en el manejo de ese sector de la administración pública han alcanzado cotas de bochorno internacional, como lo atestigua que uno de sus integrantes, Rafael Ramos de La Rosa, en estos momentos esté pagando cárcel en Miami, Florida por viajar a esa ciudad a chantajear venezolanos y pedir coimas de millones de dólares.  

Molina, igualmente, le ha metido el bisturí al por él bautizado “Clan de las Lobas”. Nos referimos al grupo de cortesanas enquistadas en el sector de las finanzas públicas venezolanas, que en comandita con sus maridos, marinovios, levantes o ligues, se encuentran avocadas a una verdadera labor de saqueo a través de negociados a la sombra de sus barraganatos.

Los expolios de PDVSA, las colusiones en el Metro, de Caracas y en el Metro de Valencia, también han copado centimetraje en la columna “Pasando la Hoja” con nombres, apellidos, pelos y señales que bastarían para mandar a la cárcel a sus autores. Es obvio que cualquiera de tales depredadores del patrimonio y de la decencia compatriota pudo ordenar el apaleamiento del jueves pasado.

Los guisos bolivarianos

Existen varios patrones, de carácter capomafioso, que hermanan todos los guisos bolivarianos informados por el periodista agredido.

El primero, es el nexo que tienen sus coautores con el submundo del hampa común. En la llamada industria del evite y azar, las relaciones con los matones, sicarios y criminales por encargo, se dan por descontadas. No hay sala de juegos que se respete, en la que no pululen tal especie de sujetos entrenados para agredir o enviar al otro mundo a quienes se les interpongan en el camino.

En cuanto a los clanes o mafias que se conforman alrededor de los negociados con el gobierno, la riqueza mal habida los conduce a hacerse acompañar por espalderos, muchas veces, efectivos policiales que en lugar de proteger ciudadanos honestos, se ensañan contra estos últimos.

Si usted o yo, aunque solo fuese en un arranque momentáneo de ira, pensáramos en contratar a un asesino tendríamos tiempo más que suficiente para arrepentirnos, pues no tenemos contacto con ningún sicario, ni estos se anuncian en las páginas amarilla. Pero para quienes viven en el delito, es muy fácil ordenarle a cualquiera de sus subalternos a la mano, la orden de una paliza. En el caso de autos, a un periodista respondón.

Otro denominador hermanador de las mafias venezolanas, es la impunidad y aquí llegamos a donde no queríamos llegar: ni una sola de las muchas denuncias de corrupción,  cohecho, guisos, bajadas de la mula, mordidas, que ha venido formulando Molina ha despertado la más mínima reacción de la Fiscalía General de la República. Mucho menos del presidente Chávez, a quien con justicia se califica de gran celestino, cómplice o coautor, de las tropelías realizadas por sus subalternos. En otras palabras,  los numerosos gangs, bandas, clanes, familias a lo Vito Corleone o los Makled, con conexiones bolivarianas, tienen patente de corso, carta blanca, indulgencia plenaria.

Por eso se han permitido darle a Manuel Isidro Molina el preaviso que le dieron el jueves en la tarde. Pa´ que sepa que hay gobierno. Pa’ que coja mínimo. O pa’ que corra o se encarame.

Agresión no investigada

El columnista deposita pocas esperanzas en el Ministerio Público y que me perdone su titular, la dama, Luisa Ortega Díaz. Damos por descontado que los autores materiales e intelectuales de la paliza contra Manuel Isidro Molina, no serán detenidos

Sí, lo comprendemos: no es fácil localizar a un hombre que actuó en la penumbra y se esfumó, apenas corría el riesgo de ser identificado.

Sin embargo una buena contribución a la sanidad ciudadana y un merecido homenaje al periodista que ha arriesgado su vida para defenderla, es que se investiguen todas las informaciones suministradas por Molina. A saber: las prácticas mafiosas de los propietarios de bingos y casinos y sus nexos con los gobernantes; los negociados en Pdvsa, comenzando por su Presidente. Las caídas y mesa limpia en el Metro de Caracas, en el Metro de Valencia, en la Superintendencia de Inversiones, en “Seguros La Previsora”, en el ministerio de Finanzas; las fortunas súbitas y a todas luces de procedencia ilícita de quienes han participado en la rebatiña.

La Fiscal General de la República y el propio Jefe de Estado, en este mismo momento, deberían estar ordenando una pesquisa vigorosa, seria, imparcial, célere, de todas las informaciones suministradas por Molina. Caso contrario, llegará el día –más temprano que tarde- de sentarlos en el banquillo, también, como culpables o encubridores, de agresiones como la perpetrada contra el mencionado columnista de “La Razón".

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Semanario LA RAZÓN

www.larazon.net

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VER VIDEO DE LA ENTREVISTA DE GLOBOVISIÓN:

http://www.dailymotion.com/video/xios5t_periodista-agredido_news

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