Foto archivo Red.
Cientos de "indignados" denunciaron la violencia empleada por la policía catalana este jueves al irrumpir en los tribunales para detener a seis miembros del movimiento acusados de participar del cerco al parlamento regional del pasado 15 de junio.
Los manifestantes volvieron a concentrarse en Plaza Catalunya, corazón de Barcelona, para exigir la “libertad sin cargos” de los seis detenidos, y defender el derecho a la “libre expresión y manifestación”.
“Es intolerable lo que está pasando, tanto por el operativo de hoy como que nos quieran llevar a la Audiencia Nacional por manifestarnos”, dijo a Télam un indignado que no quiso identificarse porque sabe que está “marcado” por la policía.
El lunes, los Mossos d’ Esquadra (policía autonómica) informaron que habían comenzado a detener a los acusados por los hechos ocurridos el pasado 15 de junio, cuando los “indignados” llevaron a cabo una protesta en las puertas del parlamento catalán para evitar que se votaran recortes sociales.
La orden era identificarlos y entregarles la notificación judicial, pero luego los dejaban en libertad. Un total de 22 personas están citadas a declarar ante la Audiencia Nacional de España por un presunto delito contra “altos cargos de la Nación”.
Las primeras detenciones fueron efectuadas en los domicilios de los acusados o en sus lugares de trabajo, pero este jueves se vivió una situación inaudita cuando unos 50 antidisturbios entraron en la Ciudad Judicial de Barcelona para llevarse detenido a un grupo de indignados que se habían presentado allí de forma voluntaria.
“Los chicos que supieron por los abogados del movimiento que iban a ser arrestados se presentaron esta mañana bien temprano ante el juez de guardia para que se hiciera cargo del asunto y dejara sin efectos las detenciones”, explicó a Télam un manifestante que estuvo presente en los juzgados.
Según relató este indignado, los abogados pidieron al magistrado que les tomara declaración allí a todos, incluidas las diez personas que fueron arrestadas entre el lunes y martes, para que no tuvieran que acudir a Madrid ante la Audiencia Nacional.
Pero ocurrió que luego de declarar ante el juez, los indignados se quedaron en la cafetería de la Ciudad Judicial, y fue entonces que el Jefe de Seguridad del establecimiento informó a la policía autonómica de su presencia en el lugar.
Sobre las 14.20 hora local, los agentes antidisturbios entraron de forma violenta en el edificio de tribunales y tras derribar mesas y sillas se llevaron a los indignados.
El juez de guardia reaccionó exigiendo explicaciones al jefe del operativo de la policía, pero al mismo tiempo el titular del juzgado de instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, Eloy Velasco, informó al tribunal de Barcelona que debía inhibirse de este asunto, que era de su competencia.
Los agentes se llevaron a seis personas esposadas. “No nos pararán”, gritaban esta noche los manifestantes, cada vez más indignados./Télam
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