Por Manuel Isidro Molina

La crisis económica venezolana es muy particular. Se siente, pero no aparece en las estadísticas oficiales, en las cuales el desempleo y la inflación bajan. Tanto el ministerio de Planificación y Desarrollo como el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informan periódicamente –muy sonrientes sus altos funcionarios- de la proeza de la “Revolución”, pues mientras el mundo entero sufre los impactos de la crisis del capitalismo mundial –desempleo, quiebra de empresas, disminución del Producto Interno Bruto (PIB), falta de créditos y encogimiento de los sistemas financieros-, Venezuela es algo así como la “cornucopia” o “cuerno de la abundancia” del planeta; y Hugo Chávez y sus ministros, los principales vendedores de esa imagen.

Ese “milagro venezolano” –distinto a los alemán y japonés de la posguerra; y al chino o al hindú, de hoy- tiene rasgos muy originales que no están en las computadoras oficiales, pero sí en el pellejo de ciudadanos y ciudadanas: “todo está más caro”, se queja la gente; los dólares de CADIVI no fluyen y los del mercado negro rondan los 7 Bs.F por unidad; la escasez de vehículos va de la mano con la especulación y la usura; no se consiguen repuestos de cenas de marcas y modelos de vehículos automotores; suben los precios de las medicinas, seguros de hospitalización cirugía y maternidad, y clínicas privadas; la mayoría de los hospitales públicos están en el suelo y el sistema ambulatorio de “Barrio Adentro” muestra sus limitaciones e incompetencias; el empleo bien remunerado y con estabilidad y beneficios de seguridad social son escasos, mientras la iniciativa privada de empresarios e inversionistas es estigmatizada constantemente y asfixiada de mil maneras; la mayoría de los organismos públicos están en mora con sus proveedores de bienes y servicios, y se niegan a discutir la contratación colectiva con sus trabajadores, a quienes –de paso- desconocen derechos adquiridos y compromisos contractuales.

Este “milagro venezolano” tiene otras peculiaridades: la corrupción administrativa, el lavado de dinero, la extorsión, el juego ilegal (caballos, bingos y casinos, entre muchos otros) y el tráfico de drogas, entre otros delitos mafiosos concurrentes, mueven montañas de dinero al amparo de las autoridades (Poderes Ejecutivo, Judicial, Legislativo y Ciudadano), tanto por incompetencia como por complicidad, siendo que muchas veces los capos son altos funcionarios del Estado, incluyendo algunos ministros, militares, policías y burócratas de empresas e institutos oficiales.

La crisis económica venezolana “no se ve” en las cifras oficiales, pero la siente el grueso de la población. Nada está bien, los sueldos y salarios de la gente honesta y trabajadora, cada día alcanzan para menos. Sólo los pocos  ricos de siempre y los burócratas enriquecidos de la robolución viven a sus anchas, tienen billete y gastan a manos llenas. Los mafiosos están en lo suyo.

EL CONFESIONARIO

·        UNA MAFIA DE ALTA PELIGROSIDAD estaría actuando dentro y alrededor de CADIVI, según fuentes muy reservadas. Corresponde a la Fiscalía General de la República, las policías comisionadas por el Ministerio Público y a las autoridades del ministerio de Economía y Finanzas establecer responsabilidades. Estos malhechores tendrían acceso, por complicidad interna, a la base de datos de CADIVI (Comisión de Administración de Divisas), para luego extorsionar a personas naturales y propietarios de empresas deudoras o solicitantes de cupos de divisas, con pago ilícito de entre 0,5 y 0,6 bolívares por dólar. Esta irregularidad mafiosa se ha entronizado en Venezuela, con nexos muy sólidos en el mercado negro de divisas, lo que el gobierno del presidente Hugo Chávez y su oficina parlamentaria (Asamblea Nacional) creyeron borrar del panorama con una “ley” punitiva que prohíbe mencionar el “mercado paralelo” de dólares,  euros y otras monedas extranjeras como el peso colombiano. Una ridiculez.

·        EL ASESINATO DE FREDDY FARFÁN, ex tesorero de FOGADE, tendría vinculación con esa mafia que opera desde y en torno a CADIVI. Me dicen que la banda es llamada “La Cazabobos”: “Ellos (los choros-asesinos), con connivencia interna, buscan los listados de los deudores y llaman a los incautos ofreciéndoles rebajarle sustancialmente la deuda con la institución a cambio de una cantidad en efectivo. Freddy la llevó y al darse cuenta de la estafa se resistió y lo mataron.” Es fácil deducir que el dinero sucio que estos mafiosos obtienen mediante extorsión, llega a círculos cubiertos de impunidad del ministerio de Economía y Finanzas y de CADIVI, donde ese “merequetengue” es harto conocido, sólo que ahora (¡como toda mafia termina matando!) el “trabajo” de estos delincuentes protegidos entró al campo de los asesinatos.

·        JUAN CARLOS GUTIÉRREZ, abogado penalista, fue víctima de un atraco, pero repelió la acción delictiva a tiros, hirió a uno de los choros y otros dos fueron apresados por la policía y pasados a Fiscalía y tribunales.

·        ¿QUÉ ESTÁ PASANDO EN VENEZUELA, para que una niña de 13 años, estudiante de segundo año de bachillerato, haya matado de cinco puñaladas a una compañera de estudios? El lamentable y asombroso caso ocurrió en el liceo “Dr. Columbo Silva Bolívar”, el pasado lunes 27 de abril, en el estado Bolívar. Lo menciono sin ánimo “amarillista”, para estimular la toma de conciencia ciudadana y el estudio por parte de especialistas para que orienten a la sociedad venezolana.

·        EL MINISTRO PEDRO MOREJÓN, de Turismo, “no sabe nada de Conviasa, el ex presidente de Conviasa es compadre de los Cabello. Al presidente (Chávez), en el 2006, le indicaron que la falla de los aviones era garrafal, debido a esto eliminaron la Contraloría. Del  Palacio mandaron a los militares bien lejos; y al resto del personal de inspección, a distintas áreas del palacio.  Una contribuidora de esto fue Titina Azuaje (ex ministra de Turismo) con sus viajes al exterior a ‘precios solidarios’.  Para arreglar al asunto enviaron a la mano derecha del Vicepresidente (Ramón Carrizales), la capitana Noris Negrón. Esperamos un informe confidencial que se lo haremos saber en breve”. José David Cabello, actual superintendente nacional tributario fue presidente de Conviasa: la dejó quebrada y ordenó “maquillar” las cuentas a un grupo de contadores y administradores del SENIAT, corrió la arruga administrativa y contable, pero la línea aérea bandera de Venezuela sigue en la bancarrota. Está bien que investiguen, pero sin impunidad. Esa saga es conocida desde la fundación de la empresa, con el actual gobernador del estado Portuguesa, teniente coronel (Av) Wilmar Castro Soteldo a la cabeza. Este es un caso protuberante de sostenido manejo irresponsable y presuntamente corrupto de una empresa del Estado por sucesivos grupos de funcionarios prevalidos de impunidad. Sin duda, el presidente Hugo Chávez Frías, sus ministros y el Contralor General de la República, Clodosvaldo Rusián, son corresponsables de ese desastre, que se extiende a los campos de operaciones y mantenimiento, lo que tampoco es ningún secreto.

·        EL COMANDANTE GONZÁLEZ ORTIZ, director del Despacho de la Secretaria de la Presidencia, aspira a ser ministro de la Secretaría.

·        ME PIDEN PREGUNTAR PÚBLICAMENTE qué ha pasado con el informe del ministro Jorge Giordani sobre la gestión de su predecesor en el ministerio de Planificación y Desarrollo, Haiman El Troudi. Lo tendría en sus manos el presidente Hugo Chávez.

·        CIRCULA POR LA RED DE CORREO ELECTRÓNICO un supuesto “Mensaje a García” que habría sido enviado al presidente Hugo Chávez por oficiales activos de la Fuerza Armada Nacional (¿?), atribuido a una "FUENTE CONFIDENCIAL". Extraigo unas frases: “El clima de tensión que se vive en el país se repite dentro de la Fuerza Armada Nacional… El clima de conflictividad es demasiado alto producto de todas las agresiones en marcha contra la disidencia política, la empresa privada y hasta con el movimiento sindical al que también quieren someter y aniquilar de no aceptar las condiciones del socialismo… ese clima de tensión política puede generar situaciones inmanejables… se vislumbran tiempos muy difíciles cuando los ingresos del país no sean suficientes para cubrir el excesivo gasto público repartido en las elevadas nóminas de los empleados del Estado, las contrataciones colectivas, las misiones y el pago de todos los compromisos contraídos en obras y nacionalizaciones de empresas… cuando las tensiones económicas, sociales y políticas confluyan en una sola, se generará un caos de tal magnitud que los militares no saldrán a controlar a las masas enardecidas que reclaman sus derechos. La FAN le pidió al Presidente restituir el clima de paz y tranquilidad mediante el respeto por quienes piensan distinto, de la propiedad privada y de los derechos de la mayoría que no comparte los principios revolucionarios y mucho menos el socialismo… (Los militares) quieren que el Gobierno baje la conflictividad, restituya el diálogo y atienda la situación económica. Si no hay comprensión de este ‘Mensaje a García’ y el caos llega, las consecuencias no serán agradables”.

·        JORGE RODRÍGUEZ, alcalde del municipio Libertador, dirigente del PSUV y psiquiatra de profesión, debe desistir de la supuesta demanda que entablaría contra el colega periodista Nelson Bocaranda Sardi. Será un rotundo fracaso, aunque sus abogados –como es costumbre- cobrarán lo suyo, prometiéndole metas inalcanzables. En todo caso, Bocaranda informó y criticó que tan alto dirigente de la “Revolución Bolivariana del Socialismo de Siglo XXI” no tiene a sus hijos en escuelas o liceos públicos sino en muy caros colegios privados. Por cierto, este es un curioso rasgo común a la nomenclatura robolucionaria, la más adinerada de Latinoamérica y el mundo. Por esas y otras cosas –como la corrupción administrativa, el abuso de poder y el dispendioso uso de los recursos públicos- he dicho, y hoy reafirmo, que la de Chávez es la “revolución” más sifrina de la historia de la Humanidad. Todos sus dirigentes, burócratas y relacionados (familiares, amigos, amantes, compinches, testaferros, etc.) viven como ricos, gastan a manos llenas, viajan, gozan su “dolce vita” y gritan que andan en “revolución”. Otro rasgo común de la sifrina burocracia chavista es su hipersensibilidad ante las críticas y denuncias públicas, lo que generalmente –abogados vivarachos mediante- les estimula a tratar de “castigar” a los denunciantes con los Tribunales.

·        OTRA NECEDAD AUTORITARISTA es la “investigación” de CONATEL contra Alberto Federico Ravell, director general de Globovisión, por sus informaciones y críticas al gobierno la madrugada del lunes 4 de mayo, a propósito del sismo de 5,4 grados Ritcher, Caracas, Miranda y otros estados centrales de Venezuela. Confieso que a esa hora (4:40 am.), inmediatamente después del susto, intenté ingresar al portan telemático de FUNVISIS y no estaba operativo, no sé si por congestionamiento. La verdad es que las autoridades venezolanas (MRI, FUNVISIS, principalmente) tuvieron una respuesta tardía –minutos, tal vez-, la que hubiese provocado una tragedia nacional, si el sismo hubiese sido algo mayor y con consecuencias físicas y humanas que lamentar.

·        EL TRÁFICO DE CIUDADANOS CHINOS por el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía, supuestamente está a cargo de una mafia dirigida por un directivo del área de seguridad aeroportuaria, vinculado a la Vicepresidencia de la República, desde donde su “protector” estaría impidiendo que prosperen las denuncias y se adelanten las investigaciones. El tema toca directamente la competencia del ministro de Relaciones Interiores y Justicia, Tareck El Aissami, por razones obvias. La tarifa se mueve, dicen mis fuentes, entre 5 y 7 mil dólares por persona ilegalmente ingresada al país. ¿Quiénes pican en esa inmensa torta? El Ministerio Público tiene todas las herramientas legales para investigar, desbaratar esa mafia y castigar a los delincuentes.

·        15 (QUINCE) MILLONES DE BOLÍVARES (“débiles”, entiendo) juega en cada carrera de caballos con la “Banca Suiza” un alto funcionario de la jefatura de Resguardo de la Aduana Aérea de Maiquetía, adscrita al SENIAT. Es parte de la mafia del, tantas veces denunciado por mí, “Pote Aduanero” que ha funcionado durante las gestiones de los superintendentes José Vielma Mora y José David Cabello, en la red portuaria y aeroportuaria del SENIAT, organismo del cual dependen todas las aduanas del país.

·        EL CARACAS PRESS CLUB inaugura su nueva sede, el próximo martes 12 de mayo. Felicitaciones a sus perseverantes miembros, quienes durante años han mantenido abierto ese escenario para la discusión amena de temas serios y el intercambio afectivo entre los participantes.

 

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