Maturín, mar 23 (Enfoques365).- Investigar al gobernador del estado Monagas, José Gregorio "El Gato" Briceño, por la presunta autoría intelectual de los asesinatos de los jóvenes Rodolfo Sánchez y Darwin Fernández, en Caicara de Maturín, exigen a las autoridades nacionales, el padre del primero y la madre del segundo.

 

Héctor Sánchez y Betzaida Fernández, padre de Rodolfo y madre de Darwin, respectivamente, han dirigido "CARTA PÚBLICA" al presidente de la República, Hugo Chávez Frías, y a las altas autoridades de los poderes Judicial, Ciudadno y Legislativo, clamando justicia y castigo ejemplar sobre los asesinos materiales e intelectuales de sus hijos.

 

Implicados como presuntos autores materiales están privados de libertad el comisario Lisandro Jaramillo, director de la Policía del Estado Monagas para el momento de la matanza de los dos jóvenes, y los agentes Eliùt Paredes, Sandoski Vargas Medina, y Mervis Josè Reyes Alcalà. Jaramillo -denuncian- está recluido ventajistamente en una clínica supuestamente pagada por la gobernación de Monagas y defendido por anogados contratados por el gobernador José Gregorio "El Gato" Briceño.

 

"EL GATO", PRESUNTO AUTOR INTELECTUAL

Los familiares de los jóvenes asesinados en Caicara de Maturín, temen que Lisandro Jaramillo, quien luego del crimen supuestamente iba huyendo hacia Colombia cuando fue arrestado en Mérida, intente fugarse desde la habitación de lujo Nro. 27 del "Hospital Metropolitano de Maturín", clínica privada donde -según los denunciantes- algunos médicos se habrían prestado para falsear diagnósticos, intervenciones quirúrgicas y tratamientos, lo que también es un delito grave, así como una transgtresión deontológica que debe ser investuigada por la Federación Médica Venezolana.

 

Héctor Sánchez y Betzaida Fernández piden la urgente intervención de las más altas autoridades nacionales en torno a la presunta autoría intelectual por la estrecha relación de Lisandro Jaramillo, jefe policial regional, con su "jefe" el gobernador José Gregorio "El Gato" Briceño y un hermano de éste, Pedro Emilio Briceño, alcalde de Caicara de Maturín, ambos conocidos por las víctimas, como se refiere en anterior reportaje publicado en enfoques365.net.

 

En el estado Monagas, se vive un estado de angustia e indefensión por la acción criminal de oficiales y agentes de la Policía de esa entidad federal, intervenida por el ministerio de Relaciones y Justicia, luego de ser conocida la responsabilidad material de Lisandro Jaramillo y sus subalternos en estos asesinatos. Los asesinatos policiales en Monagas se cuentan por decenas, y en casi todos los casos se ha producido interferencia de la justicia por parte de las autoridades regionales. Esperando contribuir a que se haga justicia y se despejen las dudas sobre la presunta autoría intelectual de estos asesinatos, publicamos íntegra la misiva de los padres de los infortunados jóvenes monaguenses:

 

 

CARTA PUBLICA

 

 

Sr. Presidente de la Repùblica Bolivariana de Venezuela

Cmdte. Hugo R. Chàvez Frìas.

 

Ciudadana Presidenta del Tribunal Supremo de Justicia

Dra. Luisa Estela Morales.

 

Ciudadana Fiscal General de la Repùblica

Dra. Luisa Ortega Dìaz

 

Ciudadana Defensora del Pueblo

Dra.Gabriela Ramìrez

 

Ciudadana Presidenta de la Asamblea Nacional

Dra. Cilia Flores

 

Ciudadanos Diputados a la A.N. integrantes de la

Comisiòn de Polìtica Interior y Derechos Humanos,etc.

 

 

Nosotros, abajo plenamente identificados, padres de Rodolfo Sánchez y Darwin Fernàndez, jòvenes asesinados en la población de Caicara de Maturin por funcionarios de la Policía del Estado Monagas de acuerdo a las investigaciones que ya han sido adelantadas por los organismos legales competentes (Asunto Principal: NP01-P-2009-000083), solicitamos muy respetuosamente de ustedes, como màximas autoridades del paìs, se sirvan intervenir y vigilar el caso de los actos criminales que enlutaron nuestras familias, para que la justicia y la ley no terminen burlados por tecnicismos legales, ni por influencias extrañas, como al parecer ya ha sucedido en otras ocasiones con casos similares en nuestra regiòn.

 

 

El Comisario Lisandro Jaramillo, ex-Director de la Policía del Estado Monagas, imputado como autor material de dichos asesinatos, desde que fuera detenido por el C.I.C.P.C. no ha pisado un solo dìa las puertas de la càrcel. Y, por el contrario, fuè hospitalizado, primero, en la clìnica privada "Hospital Metropolitano" de Maturin, y luego, desde el dìa 28 de enero del 2009, fuè recluido en la habitación especial (No. 27) de la clìnica privada "Centro de Especialidades Mèdicas" donde aun se encuentra, asumiendo la Gobernación del Estado Monagas, indebidamente, la totalidad de los gastos ocasionados, cuyo monto sobrepasa la suma de cuarenta y cinco millones de bolivares, hasta la fecha, (copias de facturas en nuestro poder) todo fundamentado en diagnòsticos mèdicos aparentemente falsos, e intervenciones quirùrgicas de cuidado, presuntamente inexistentes, lo que nos conduce a pensar que, el Comisario Jaramillo està siendo protegido por altas autoridades regionales, mas aun cuando se dice que, tambien por cuenta de la Gobernación, se contrataron para su defensa los servicios del Abogado Ramòn Salgar, hermano de la actual Directora de Seguridad Ciudadana de la Gobernación de Monagas.

 

 

Mientras tanto sus còmplices, los policìas: Eliùt Paredes, Sandoski Vargas Medina, y Mervis Josè Reyes Alcalà, que formaron parte de la comisiòn policial que asesinò a nuestros muchachos, se encuentran detenidos en las celdas de la DISIP, después de haber confesado còmo sucedieron los hechos, señalando la responsabilidad y autorìa material de los crímenes por parte del Comisario Jaramillo, a quien supuestamente le oyeron decir aquella noche que, "cumplìa òrdenes de su jefe", lo que nos hace sospechar la existencia de una autorìa intelectual. ¿Quién era, o es, el jefe de Jaramillo?.

 

 

Entre otros detalles ya conocidos en la calle, se habla de unas llamadas telefònicas del Gobernador Briceño al Comisario Jaramillo, en los precisos momentos en que nuestros hijos eran detenidos y asesinados: ¿No le informò Jaramillo a su jefe, en esas llamadas, el procedimiento que estaban llevando a cabo en Caicara, vestidos de civil, y utilizando vehìculos propiedad de la Gobernación de Monagas?

 

 

Tambien se habla de una supuesta reuniòn informal, horas previas al procedimiento que culminò con el asesinato de Darwin y Rodolfo, del Alcalde de Caicara Pedro Emilio Briceño (hermano del Gobernador Briceño), en su propia residencia, con el Comisario Jaramillo y el resto de los policìas involucrados.

 

 

Por lo demas, las declaraciònes de los testigos que presenciaron las detenciones, y las pruebas balísticas que resultaron positivas en las armas de los funcionarios que supuestamente utilizò Jaramillo para ultimar a los jóvenes, constituyen serios e incontrovertibles elementos de juicio que conducen a la culpabilidad material del ex –Director de la Policia y sus secuaces, y a una posible autorìa intelectual que no debe ser descartada, y por el contrario debe ser seriamente investigada.

 

 

No obstante el cùmulo de indicios anteriores, al Comisario Jaramillo lo mantienen alojado en una especie de suite, con privilegios que consideramos insòlitos, propiciadores de la mas descarada impunidad. Tal generosidad para con un reo de asesinato, constituye una afrenta a la justicia venezolana. Y por supuesto, tambien al gremio de mèdicos, por la violación de los principios èticos y deontológicos, en los que pudieran haber incurrido algunos de sus integrantes, que se han prestado (¿o vendido?) no sabemos si para proteger al policía criminal, o, al autor intelectual de los homicidios.

 

 

 

Como quiera que, intuìmos que al Comisario Jaramillo, con el otorgamiento de tales "beneficios", sin precedentes en la administración de justicia regional, se le estarìa brindando la oportunidad de huir del paìs, como ya al parecer lo habìa intentado cuando fuè apresado en la ciudad de El Vigìa, Estado Mêrida, el pasado mes de enero; o tal vez, propiciando la ocasiòn de que pudiera ser extrañamente asesinado, "para que concluya con su muerte la cadena de responsabilidades", tal como se ha rumorado insistentemente en Maturin, es por lo que nosotros, ciudadanos humildes del Estado Monagas, afectados en lo más hondo de nuestros corazones por el dolor de la ausencia de nuestros hijos, pedimos la intervención de ustedes, para que se imponga con prontitud la justicia y se llegue al total esclarecimiento de los señalados actos criminales; y asì, con el debido rigor, los autores materiales e intelectuales, si los hubiere, de dichos homicidios, paguen definitivamente sus culpas.

 

 

 

Por ùltimo, esperando que en la condiciòn de màximas autoridades del paìs, y tambien padres de familia que pueden valorar en su justa dimensiòn el dolor que se siente al ver un hijo vilmente asesinado, nos suscribimos muy respetuosamente, con la seguridad de que nuestras sùplicas de justicia seràn debida y oportunamente atendidas, firmamos en Maturin a los veinte dìas del mes de marzo del 2009.

 

 

Betsaida Fernàndez (CI: 3699035)

 

 

Hèctor Sánchez (CI: 3327140)

 

 

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