México, 29 Mar (Telesur).- Un miembro de Los Aztecas, banda vinculada al narcotráfico, fue detenido en Ciudad de Juárez (norte de México) por ser sospechoso de los asesinatos de tres personas vinculadas al Consulado estadounidense en dicha ciudad, informó este lunes el portavoz del Operativo Coordinado Chihuahua, Enrique Torres.
"Puedo confirmarlo, hay la detención de una persona relacionada con el caso del consulado", reveló Torres tras precisar que el pasado viernes el sospechoso fue arrestado por el Ejército.
Asimismo, señaló que el "Ejército mexicano confirmó la detención de una persona vinculada al triple homicidio".
Según las declaraciones de Torres a un medio local, el retenido "estaba siendo investigado por parte de autoridades estadounidenses y mexicanas" al momento de su detención.
Pese a que Torres no precisó la identidad del sujeto arrestado en Ciudad Juárez, agencias de noticias han publicado la identificación.
"Hasta el momento no se ha dado la información oficial sobre la identificación de esta persona. Fue el Ejército quien llevó a cabo esta detención", sostuvo Torres.
Mientras tanto, agencias de noticias han publicado que se trata de Ricardo Valles, un mexicano de 45 años de edad, quien tiene residencia legal en Estados Unidos (nación fronteriza con México). Además, el hombre cuenta con antecedentes en al menos 10 cárceles estadounidenses.
Los cargos que se le atribuyen a Valles, en los penales de Estados Unidos, están relacionados con carteles y narcotráfico.
El retenido es considerado jefe de la pandilla Los Aztecas, sicarios a sueldo del Cartel de Juárez y responsables de dos ataques perpetrados el pasado 13 de marzo.
Las victimas son una funcionaria estadounidense del consulado y su esposo, quienes fueron ejecutados en el centro de la ciudad cuando viajaban en una camioneta. Una niña de unos tres meses de edad, que viajaba con la pareja, resulto ilesa en el ataque.
Las autoridades señalaron que los jóvenes, con edades entre los 25 y 30 años, fueron asesinados con armas de calibre 9 milímetros.
La tercera víctima fue un policía estatal, esposo de una empleada de la sede consular. El oficial fue ajusticiado por un grupo de hombres armados, en la misma ciudad mexicana. La autoridad viajaba con su hijo de 4 años, quien no sufrió daños.
Según la agencia de noticias AFP, el arresto de Valles fue producto de las investigaciones que realizan en Ciudad Juárez numerosos efectivos de la estadounidense Oficina Federal de Investigaciones (FBI, por su sigla en inglés).
Las investigaciones permitieron la ubicación del inculpado, tras lo cual el Ejército Mexicano procedió a su arresto.
Según las primeras investigaciones, la detención se llevó a cabo "en un domicilio" de Ciudad Juárez, localidad fronteriza con El Paso (Texas, EE.UU.), considerada una de las más violentas del país. Presuntamente al momento de la detención, el sospechoso portaba un arma de calibre 9 mm.
Los asesinatos fueron condenados por los Gobiernos de Washington y de México, ambos prometieron -para entonces- castigar a los responsables.
La semana pasada, la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton sostuvo un encuentro de Alto Nivel con su par de México, Patricia Espinosa, en la que aceptó la responsabilidad de su país en el problema del narcotráfico y acordó ampliar la Iniciativa Mérida para una guerra antinarcóticos más eficiente.
"Sabemos que la demanda por drogas y la compra de armas hacen que se facilite la violencia en México y Estados Unidos debe y está haciendo su parte para ayudarlos a ustedes para combatir esto", aseguró Clinton.
México pretende establecer una estrategia de seguridad con diversos sectores de la región norteña, ante el incremento de la violencia y la indignación popular.