Caracas, 29 Sep. ABN.- El recién electo Primer Ministro Japonés, Yukio Hatoyama, quien es licenciado de la escuela de Ingeniería de la Universidad de Tokio y tiene un doctorado en la universidad estadounidense de Stanford, en California, asumió el pasado 16 de septiembre de este año las riendas de la nación nipona para “crear una nueva manera de hacer política”, declaró en rueda de prensa desde su casa de Tokio.
Con relación a la situación económica de la nación asiática señaló que 'dadas las circunstancias históricas derivadas de sus equivocadas acciones del pasado, Japón ha dudado en desempeñar un papel activo en esta región', dijo.
Para Hatoyama, 'de ninguna manera éste es el punto de llegada. Finalmente, podremos modificar políticas, crear una nueva manera de hacer políticas que satisfagan las expectativas del pueblo”, agregó.
El Partido Democrático Liberal (PLD) japonés, que ha estado en el poder durante los últimos 53 años, perdió su sitial, cerrando así una era en la cual la nación asiática se convirtió en la segunda potencia mundial.
El futuro nipón empieza a escribirse con las políticas que implementará el líder del triunfador Partido Democrático (PDJ), Yukio Hatoyama, quien supo convencer a 104 millones de votantes en medio de la peor crisis económica desde la Segunda Guerra Mundial en el país.
En tal sentido Hatoyama, aseveró que pondrá su política “al servicio de la vida de la gente”, a través de programas generosos en subsidios para las pensiones de la tercera edad, focalizando ayudas para las familias y los más desfavorecidos.
Reactivar la economía gracias al consumo, garantizar la gratuidad parcial de la enseñanza, otorgar ayudas por nacimientos y la supresión de los peajes en las autopistas, son algunas de las promesas que consolidaron a Hatoyama para lograr el triunfo electoral el pasado 16 de septiembre de este año.
Este panorama se desarrolla en medio de una economía contraída, lo que se traduce quizás en el reto más grande que enfrenta el primer ministro japonés, quien recibe una nación donde el desempleo alcanzó una cifra récord de 5,7% en julio, equivalente a 3,59 millones de personas cesantes, la más alta registrada desde la Segunda Guerra Mundial, por su parte el índice de producción minera y manufacturera se situó en los 76,0 puntos frente a la base 100 de 2005, mientras que el sector de equipos de transporte tales como automóviles y camiones se contrajo un 17,3%, cifra que contribuyó enormemente a la caída de la producción total, aseveraron fuentes del Ministerio de Economía, Comercio e Industria japonés.