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Por Jorge Pailhé
Enviado especial
Montevideo, oct 23 (Télam).- Los principales politólogos uruguayos prefieren no pronunciarse por un triunfo de José Mujica en la primera vuelta de las elecciones presidenciales, el domingo, pero admiten esa posibilidad y también que pueda ganarle a Luis Lacalle, del centroderechista Partido Nacional, en una eventual segunda vuelta.
Varios especialistas en encuestas de opinión evaluaron, a pedido de Télam, las alternativas de la campaña electoral y anticiparon su mirada sobre el escenario de gobernabilidad del país luego del recambio presidencial que se producirá el 1º de marzo de 2010.
Juan Carlos Doyanart (Interconsult), Adriana Raga (Cifra) y Eduardo Bottinelli (Fctum) señalaron que las campañas de Mujica y Lacalle tuvieron un desplazamiento de su eje inicial, ya que ambos estuvieron dos meses estancados en 44 y 31 por ciento de intención de voto respectivamente, y no lograban despegar.
En ese sentido, a Mujica le fue mejor que a Lacalle, según los encuestadores, ya que el cambio de enfoque de su campaña consistió en despersonalizar la campaña, haciendo hincapié bastante más en la figura de su compañero de fórmula Danilo Astori -ex ministro de Economía de Vázquez- y, sobre todo, en la muy buena imagen pública que aun hoy mantiene el gobierno de Tabaré Vázquez.
"Quedó muy clara la idea de que votar a Mujica es votar al Frente Amplio, y eso le sumó apoyos a la candidatura de Mujica”, resumió Raga, en tanto Doyanart razonó en forma similar que "la cuestión consistió en `rodear` a Mujica, cuya imagen no despertaba seguridad en algún electorado”.
"Pepe” Mujica, de 74 años y ex guerrillero tupamaro, es un veterano dirigente de izquierda, dueño de una coloquial forma de hablar que acostumbra a vestirse con informalidad, factores considerados por los especialistas como probables puntos negativos ante el electorado uruguayo, tradicionalmente de centro y algo conservador.
Bottinelli abonó la idea de que el FA aprovechó mucho mejor que el Partido Nacional el cambio de estrategia electoral, y fue el único que sostuvo que "no se debe descartar un triunfo de Mujica en primera vuelta”.
Doyanart en cambio "se jugó” por dar por hecho que habrá balotaje, instancia en la que "de acuerdo a cómo le haya ido el domingo” Mujica debería sortear con éxito, y puso de relieve algunas cuestiones que se juegan en la segunda vuelta.
"En el ballotage el candidato está desnudo; la cosa es uno contra uno y ahí la gente analiza sólo al candidato. En este caso, es muy interesante ver que los ciudadanos advierten debilidades y fortalezas diametralmente opuestas en Mujica y Lacalle”, explicó Doyanart.
Al respecto, ilustró que "lo que la gente valora de Mujica, que son sus características personales -simpatía, simpleza-, reprueba de Lacalle -soberbia, severidad en el gesto-, y lo que despierta dudas en `Pepe` -condiciones para gobernar- se aprueba en el caso de Lacalle, a quien consideran un hombre con experiencia y un buen administrador”.
Todos los encuestadores coincidieron en que no es posible calcular la incidencia que pudo haber tenido en el electorado el acercamiento de principios de semana de Mujica y Vázquez, quienes se encontraron en un evento y fueron fotografiados juntos cuando arreciaban rumores de que existía una cierta tirantez entre ellos, ya que no hubo tiempo de hacer encuestas posteriores.
Para Raga, "es normal que Vázquez apoye al candidato del FA a pesar de que él hubiera preferido que fuera Astori”, pero Doyanart no descartó que el actual presidente tenga poco interés en un triunfo de Mujica y ya esté preparando su candidatura para 2014.
"En un plano de especulaciones, podemos decir que Vázquez podría preferir un próximo gobierno de Lacalle para volver él como candidato en 2014, cosa que tal vez no pueda hacer con un mal gobierno de Mujica”, puntualizó el politólogo, con pasado como dirigente de la Democracia Cristiana.
Respecto del escenario de gobernabilidad, todos los especialistas dijeron que sería más positivo para el país un triunfo de Mujica, dado que Lacalle enfrentaría condiciones bastante duras que lo obligarían a realizar muchos acuerdos.
"Si gana Mujica habría fuertes discusiones en la interna del FA -estimó Bottinelli- porque luego del protagonismo que obtuvo en la campaña, Astori se convirtió en un hombre de espacio en la alianza de gobierno, y Vázquez por peso propio también sería una persona de consulta con opinión propia”.
"Pero para ganar el balotaje Lacalle tendría que hacer pactos con todos los partidos menos el FA, con lo cual su gobierno estaría destinado a respetar esos acuerdos y su estabilidad sería muy frágil”, completó el sociólogo.
Finalmente, todos los especialistas coincidieron en destacar la pobreza temática que tuvo la campaña, con más ataques personales que propuestas. "Las pocas propuestas que se conocieron son bastante parecidas; está claro que este Frente Amplio está mucho más cerca de la Socialdemocracia europea que de los partidos tradicionales de izquierda”, aseveró Doyanart.
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