Beirut, 24 ene (Télam).- Un Boeing 737 de Ethiopian Airlines cayó al mar después de su salida del aeropuerto de la capital libanesa con 82 pasajeros y ocho tripulantes, y desapareció de las pantallas de radar poco después del despegue. Según un funcionario del aeropuerto, la aeronave fue alcanzada por un rayo. Las autoridades ven “improbable” que se trate de un atentado.
El vuelo ET-409 de Ethiopian Airlines había partido del aeropuerto de la capital libanesa a las 02:35 hora local con 82 pasajeros y ocho tripulantes y desapareció de las pantallas de radar poco después del despegue.
Entre los pasajeros había 51 libaneses, 23 etíopes, dos británicos, un turco, un francés, un ruso, un canadiense, un sirio y un iraquí. En la nave accidentada viajó también la esposa del embajador de Francia en Beirut, Marla Sánchez Pietton, según informó una fuente de la legación francesa en el Líbano.
Un funcionario del aeropuerto de Beirut dijo que el avión fue alcanzado por un rayo antes de precipitarse al mar. Testigos aseguraron haber oído un fuerte ruido y luego vieron caer al mar un avión envuelto en llamas.
Cuatro cadáveres fueron recuperados hasta el momento de las aguas después de que un avión etíope se precipitara al Mediterráneo frente a las costas del líbano con 90 personas a bordo, informaron fuentes militares libanesas.
El ministro de Transporte libanés, Ghazi Aridi, dijo que el avión de la compañía Ethiopian Airlines cayó al mar a 3,5 kilómetros al oeste de la población costera de Naameh.